¿Cómo surgió la idea de filmar este documental?

El crear un audiovisual sobre la relación que Benito Ansola, un sacerdote de Lekeitio, ha tenido con el cine a lo largo de su vida ha sido siempre una idea que rondaba en el aire. Con el paso de los años, ese proyecto quedó archivado, pero cuando surgió la oportunidad de crear un audiovisual sobre el cine vasco y en euskera, se vio que la historia de Benito era el hilo perfecto para ese relato, y así nació ‘Zortzitik infinitura’. En este trabajo, con la historia de Benito como guía, se cuenta la evolución del cine vasco y en euskera.

¿Hubo algún obstáculo notable en la fase inicial del proyecto?

El trabajo más difícil en la fase inicial de este proyecto fue seleccionar a los protagonistas que sostendrían la narrativa y ajustar sus entrevistas a nuestro plan de grabación. Teníamos días específicos para realizar las entrevistas, y hacer coincidir las agendas de los protagonistas con nuestras condiciones de grabación no fue una tarea fácil.

¿Qué criterios se utilizaron para seleccionar al elenco?

Era indiscutible que el protagonista o hilo conductor sería Benito Ansola, y desde el principio tuvimos claro que la guía del documental sería Miren Agur Meabe; lekeitiarra, conocida de Benito y amiga, además de ser una figura muy destacada en la cultura vasca. El criterio para seleccionar a los protagonistas también fue claro. La lista de entrevistados/as debía estar compuesta por figuras que han tenido una influencia en el cine vasco y en el cine en euskera, aquellas que han vivido la evolución del cine y han dejado su huella. Sus vivencias y episodios enriquecen el relato.

¿Cómo ha sido la experiencia de grabación?

Ha sido una experiencia especial, enriquecedora y única, con todos sus desafíos y dificultades. La creación de este documental me ha mostrado los obstáculos y dificultades que el cine local ha tenido que superar para llegar a lo que llamamos “el auge del cine vasco”. Y lo importante que es darle su lugar al cine en euskera en la promoción de la lengua y la cultura vasca, siendo un escaparate fundamental de nuestra cultura.

‘Zortzitik infinitura’ se proyectará en la sección Zinemira del Festival de Cine de San Sebastián. ¿Cómo recibiste la noticia?

Recibí la noticia con sorpresa y alegría porque entrar en la sección Zinemira no es un premio cualquiera. Es un logro enorme, teniendo en cuenta el peso y la influencia que tiene Zinemira en el cine vasco. Ha sido, sin duda, el mayor premio que podíamos alcanzar con el documental.

En tu opinión, ¿cómo acogerá el público el documental?

El público de Zinemira es uno que genera mucho respeto. Mi único deseo es que sirva para aprender un poco más sobre el cine vasco y en euskera, y para crear conciencia sobre la contribución que figuras como Benito Ansola y festivales como Euskal Zine Bilera de Lekeitio han hecho al cine local.

Después del festival, ¿qué recorrido tendrá la obra?

En cuanto al calendario de este año, después de Zinemira presentaremos el documental en otros festivales, como la Euskal Zine Bilera de Lekeitio y ZINEBI, entre otros.

¿Tienes algún otro proyecto en marcha?

Hay algún proyecto en marcha, pero necesita formas para concretarse. Es difícil saber si lograremos llevarlo a cabo, pero esperamos que el trabajo de ‘Zortzitik infinitura’ nos dé un pequeño empujón para lograrlo.