2023-08-17
“Poder compartir la película en una sala es el sentido último de hacer cine y, si sucede en una sección tan prestigiosa como Giornate, significa mucho”
El próximo 30 de agosto dará comienzo el Festival Internacional de Cine de Venecia, en el que Víctor Iriarte tendrá la oportunidad de debutar con su película ‘Sobre todo de noche’. El director nos cuenta cómo afronta esta cita tan prestigiosa.
- ¿Qué supone para ti ser seleccionado con tu ópera prima para participar en la Giornate degli Autori del Festival de Cine de Venecia?
Es una gran noticia y nos hace mucha ilusión, pues Venecia es junto a Cannes, Berlín y San Sebastián, una de las grandes citas mundiales para el cine. Por un lado, es un foro que la industria tiene marcado como cita ineludible y al que acude la prensa internacional más importante. Y al mismo tiempo, para ‘Sobre todo de noche’ supone su presentación mundial al público. Hacer una película es un proceso muy largo e intenso. El momento de su presentación es clave, supone el final de una etapa y el inicio de otra; es ahí donde uno termina de saber qué tiene entre manos. Poder compartir la película en una sala es el sentido último de hacer cine y, si sucede en Venecia, en una sección tan prestigiosa como Giornate, significa mucho.
- ¿Esperabais esta selección?
Uno nunca sabe dónde va a poder estrenar. Sabíamos que teníamos una película especial, con un casting y actuaciones muy potentes, una historia que va del thriller al melodrama, y unas decisiones formales que dialogan con el cine autoral contemporáneo. Pero la inclusión en un festival u otro es compleja. Los comités de selección van viendo las películas y comienza un diálogo: hay cartas de invitación, hay rechazos, hay listas de espera, hay negociaciones varias… Nuestra agente de ventas internacional es la compañía Alpha Violet, una empresa francesa con mucha experiencia en el sector, que ha sabido guiarnos muy bien en estas decisiones finales. El objetivo no es que un festival te admita, sino dar con el festival y la sección que más pueda ayudar a la película con su circuito internacional de estrenos, su posicionamiento, sus ventas... Entre todo el equipo hemos decidido que Giornate es el escenario más adecuado para estrenar una película como la nuestra.
- ¿Con qué expectativas acudes a la cita?
Intentaremos disfrutar del encuentro con el público, de las otras películas de la sección y del marco incomparable de los canales en el Lido veneciano. Como director es inevitable estar un poco nervioso, pero estoy con muchas ganas de esos primeros visionados con un público que va a descubrir por primera vez esta historia en pantalla grande. Y como producción, acudimos con ganas de que la industria nos conozca, de que otros festivales se interesen por el título, y de que las distribuidoras internacionales muestren su interés y podamos vender la película al máximo de territorios posibles. Este es el inicio de otra fase que supone compartir la película y poder mostrarla al mundo. Somos conscientes de que dar a conocer nuestro trabajo en el Festival, además de la atención de la prensa y los posibles premios, nos posicionan para el estreno en salas a nivel estatal, previsto para el 1 de noviembre, así como para la temporada de premios de otoño-invierno. Se trata, en definitiva, de que Venecia nos ayude a que el público tenga ganas de ver nuestra película.
- ¿Cómo nos presentarías el filme?
En una película de cine negro que cuenta el encuentro de dos mujeres (Lola Dueñas y Ana Torrent) a orillas del río Duero. Vera es una madre que tuvo que dar a su hijo en adopción. Cora es una madre adoptiva. Las dos están a punto de cambiar sus destinos para siempre. La película comienza con un código de cine negro y avanza en forma de ‘road movie’: primero Madrid, después San Sebastián y finalmente Portugal, ya muy cerca de Oporto. Son muy importantes esos paisajes y cómo van presentando y modificando a los personajes. Durante ese viaje hacia el oeste, el género policiaco del comienzo va pasando al melodrama, hasta el punto de que el último bloque se puede definir como una película de amor. Es una trama que va descubriendo varios secretos que no podemos desvelar, pero diré que es una película que oculta tres muertes, dos robos y una huida.
- Se trata de tu ópera prima. ¿Cómo has vivido esta experiencia?
Una de las claves de la película ha sido estar rodeado por un equipo de profesionales con mucha experiencia, que han permitido llevar lo más lejos posible la búsqueda formal y creativa que nos propusimos al iniciar el proyecto. Hacer una película es un acto colectivo, por lo que se puede entender como una suma de talentos y de fortalezas. Y donde uno no llega, llega su equipo. Por ejemplo, en la producción participan La Termita Films, de Isaki Lacuesta e Isa Campo, dobles ganadores de dos Conchas de Oro, e Inicia Films, con Valérie Delpierre, productora de ‘Verano 1993’ de Carla Simón o de ‘20.000 especies de abejas’ de Estíbaliz Urresola. Y sus carreras y experiencia han convivido con dos productoras emergentes de Euskadi como Atekaleun (Tamara García) y CSC Films (Katixa de Silva). Esta combinación de gran experiencia y nuevos talentos se ha dado en todas las áreas. Por ejemplo, tener a Lola Dueñas y Ana Torrent nos ha permitido explorar con total creatividad los límites de sus personajes. La película ha crecido gracias a ellas, y ese talento y experiencia ha permitido que un actor primerizo como Manuel Egozkue, el personaje puente que une a las dos mujeres, haya dado también lo mejor de sí. Las tres se han acompañado y se han potenciado.
En la parte técnico-artística ha sucedido lo mismo. Partíamos de un equipo con mucha experiencia en la industria que nos ha permitido crecer durante todo el proceso: Isa Campo en la coescritura del guion, premio Goya al Mejor Guion Adaptado 2023 por ‘Un año, una noche’; Alazne Ameztoy en el sonido directo, premio Goya al Mejor Sonido por ‘La trinchera infinita’; Maite Arroitajauregi en la banda sonora original, premio Goya a la Mejor Música por ‘Akelarre’; Izaskun Urkijo en la dirección de arte, que se ha encargado de la dirección artística de ‘20.000 especies de abejas’, o Ana Pfaff en el montaje, montadora de ‘Verano 1993’ y ‘Alcarrás’.
Por lo tanto, es mi primera película de ficción, pero me he sentido muy bien acompañado. Me gustaría pensar que la experiencia de las profesionales consagradas que he citado se ha sumado a la curiosidad y arrojo, a veces inconsciente, de la parte del equipo más primeriza. Estos equilibrios pueden tener sus riesgos, pero mi sensación es que si se hace bien, si la coordinación funciona y se comparte un mismo entusiasmo por la película, se aprende y se suma. Todo ese trabajo se ve reflejado después en la pantalla.
- El filme ha participado en diferentes laboratorios y WIP. ¿Crees que esto ha ayudado a abrir más puertas? ¿Cómo han ayudado estas participaciones al desarrollo del proyecto?
La internacionalización es una palabra clave en cualquier industria con aspiraciones de crecer, y en el cine sucede lo mismo. Nuestra película es una coproducción entre Euskadi y Cataluña, a las que se suman como coproductoras Francia (4A4 Productions, Andres Queralt) y Portugal (Ukbar Filmes, Pablo Iraola). No tiene por qué ser mejor una película por ser una coproducción, pero sí tiene más fácil abrirse paso en el mercado. Y en nuestro caso, la película tiene esa aspiración doble.
Por un lado, una marcada pretensión autoral en el uso del lenguaje cinematográfico, pero también una aspiración de llegar a los públicos y de hacerse un hueco en el mercado. El contenido y la forma han sido mi máxima preocupación como director durante todas las fases del proceso. Aun así, gracias al equipo, hemos dado mucha importancia a crear una estructura de producción que nos permitiera presentar el proyecto en los foros internacionales de la industria (laboratorios y WIPS) para crecer a partir de ahí, tanto creativa como financieramente. Internacionalmente hemos participado en FID Lab (Marsella, Francia), Les Arcs WIP (Francia) y First Cut LAB Trieste (Italia). A nivel estatal, hemos presentado el proyecto en Abycine WIP, Málaga WIP y D’A Film Festival LAB. Esto ha hecho que la película se conociera mucho antes de que estuviera terminada, y hemos podido hablar desde muy pronto con distribuidoras, agentes de ventas, festivales y profesionales del sector. Además, hemos tenido la suerte de obtener numerosos premios en metálico o en servicios en estos foros, pues nos ha ido muy bien en las presentaciones.
El proyecto, por lo tanto, se ha fortalecido durante el proceso y al final todo este trabajo intenso nos ha llevado a obtener fondos de dos de los sellos de calidad más importantes de Europa, que han terminado siendo socios de la película: Eurimages y Aide Aus Cinémas du Monde (CNC Francia). Trabajar con este equilibrio entre contenido autoral y estructura sólida e internacional es muy interesante. Creo que es una de las claves para que una industria como la del cine siga creciendo, y es importante para el cine vasco que las películas busquen y crezcan en este camino.
- Una vez estrenado en Venecia, ¿qué recorrido tenéis pensado realizar con el film? ¿Tenéis previsto estrenar en cines?
La película se estrena en salas de todo el estado el día 1 de noviembre. Antes participaremos en la Sección Oficial de un prestigio festival español de otoño. Las películas y sus estrategias se van organizando mucho antes de que estén terminadas y en nuestro caso cerramos el acuerdo con nuestra distribuidora Atalante hace más de un año, incluso antes de empezar a rodar. Por lo tanto, respecto al estreno en salas, hay todo un trabajo que estamos realizando desde hace meses. Se ha elegido esa fecha para entrar en la vuelta del curso laboral y para posicionar el título respecto a los premios y las listas de otoño-invierno, con aspiraciones también de llegar a los Goya bien posicionados. Una vez estrenada en Venecia, la película inicia de la mano de nuestra agente de ventas, Alpha Violet, una gira internacional de presentaciones en diferentes festivales, con el fin de ir buscando nuevos públicos y nuevas ventas para distribución en países. Es toda una estructura muy precisa para que la película llegue de la mejor manera al público local e internacional. Tengo muchas ganas de disfrutar de ese encuentro con las salas. Uno aprende mucho sobre su película en el momento en el que otras personas la ven. Estoy deseando compartir ‘Sobre todo de noche’ y empezar a escuchar las reacciones del público. Ahí sabremos por fin qué película hemos hecho finalmente.