¿Cómo nos presentaríais ‘Lo que no se ve’?

María Algora (M.A.): Es un cortometraje de corte social con tintes fantásticos; un drama con toques de humor y realismo mágico. La historia habla del tabú que hay entorno al suicidio: Ane, la hija de Carmen, se entera en su 30 cumpleaños de que su padre no falleció como le habían contado de pequeña. Esta revelación cambia la vida de Ane.

Mikel Bustamante (M.B.): Es una historia que habla de los secretos familiares y el tabú que se genera en torno al suicidio de un miembro de la propia familia. La vergüenza, el miedo o la culpa se ponen encima de la mesa para intentar sanar una herida que cuesta mucho cerrar.

¿Cómo surgió la idea de crear este corto?

M.A.: La idea surge a raíz de una conversación con Mikel donde le explico de qué manera me enteré con 16 años del suicidio de un familiar. Toda mi vida había crecido con el relato de que su muerte había sido por un accidente doméstico y, de la manera más anodina, en una comida familiar, a una tía mía se le escapó. Fue un shock para mí y a partir de entonces empecé a hablar mucho con mi padre para entender y desenmarañar el tabú familiar.

M.B.: Nos pareció una escena muy interesante como idea inicial, desde la que ir profundizando y entendiendo a los personajes, y que finalmente derivó en el viaje de reconciliación entre madre e hija.

Viviréis el estreno mundial del trabajo en Málaga. ¿Qué supone para vosotros estrenar en un festival tan prestigioso?

M.A: Si hace dos años, cuando empezamos a levantar el proyecto y, a la par, Mikel estaba estrenando en Málaga ‘Cinco Lobitos’, me dicen que volveríamos aquí con ‘Lo que no se ve’, me parecería un sueño casi imposible. Cuando nos dieron la noticia, fue una alegría inmensa. Lo siento como un reconocimiento y un abrazo al trabajo y al cariño que todo el equipo hemos puesto en contar esta historia.

M.B: Es un honor y un privilegio. Levantar el cortometraje nos ha costado mucho trabajo y esfuerzo, y poder estrenarlo en Málaga es la recompensa soñada. También, personalmente, es un festival del que guardo unos recuerdos increíbles del año 2022, de cuando se estrenó ‘Cinco Lobitos’ y tuvo una acogida espectacular. Así que para mí es un sueño volver a Málaga y, además, estrenando una producción propia y una historia tan personal.

¿Qué esperáis de vuestra participación allí?

M.A.: Tengo muchas ganas de compartir la historia con el público y ver qué sienten con el viaje que hacen Ane y Carmen: si conectan con la historia, si se llevan alguna reflexión a casa… El día del estreno nos acompañará parte del equipo: Andrea Martínez, directora de fotografía; Rakel Muniain, directora de producción; Juantxu Álvarez, productor; y el actor que hace de mi aita y que ha compuesto la canción original, Manuel Minaya. Además, me hace mucha ilusión que me acompañen mis padres; están muy ilusionados con el proyecto y la historia les toca de manera personal. Pase lo que pase, sé que será una noche especial.

M.B.: Disfrutar del festival, conocer a mucha gente, ver otras películas y también que nuestra historia le llegue y le remueva a la gente que le tenga que llegar.

Teniendo en cuenta que se trata del estreno a nivel mundial, ¿existen nervios por ver la acogida por parte del público y de la crítica?

M.A.: Por un lado, hay una mezcla entre nervios y expectación por ver las reacciones del público y de la prensa. Pero por otro, cuando lo pienso, siento que el trabajo ya está hecho y que estamos orgullosos de la película y del proceso creativo que hemos tenido hasta llegar al resultado final. Realmente ha sido un viaje precioso. En mi caso, tengo que hacer un ejercicio de confianza y de soltar la exigencia. Confío en que a quien le tenga que llegar la historia, le llegará.

M.B.: Son nervios buenos. Creo que hemos contado una historia que era muy importante tanto para María como para mí; a los dos nos toca el tema de cerca y sabemos que a mucha gente también le resuena. En mi caso, el hecho de haberlo podido plasmar en el cortometraje sin mucha más pretensión que intentar hablar de ello sin miedo, hace que esté más tranquilo en cuanto a las críticas.

Una vez pasado Málaga, ¿qué recorrido tenéis previsto realizar con el cortometraje?

M.A.: A nivel nacional, después de Málaga, el cortometraje intentará llegar a cuantos más lugares posibles. Me encantaría poder viajar con él y hacer coloquios. Creo que el tema del que hablamos da para mucha conversación. Ojalá pronto podamos estar presentándolo en Euskadi, tenemos muchas ganas de traerlo aquí. A nivel internacional, estamos buscando con nuestra distribuidora un estreno fuera de España que resulte potente. Cruzamos los dedos, y esperamos que nos lleguen pronto buenas noticias.

M.B.: El recorrido ideal sería aquél que hiciera que el corto se viera mucho. Ojalá estar en muchos festivales nacionales e internacionales y también en muchas pantallas de cualquier tipo, para que se ponga encima de la mesa un tema tan oculto en nuestra sociedad.

¿Consideráis que vuestra participación allí puede ayudar a acercaros a otros festivales?

M.A.: Creo que desde otros festivales se miran siempre con cariño las piezas que están seleccionadas en Málaga. Así que esperamos que el paso por el festival nos ayude a que se detengan otros festivales a ver nuestra historia.

M.B.: Ojalá que sí. El festival de Málaga es una ventana de primera categoría y esperamos que esto le dé un buen impulso a ‘Lo que no se ve’.

De cara a futuro, ¿qué otros trabajos tenéis entre manos?

M.A.: Nos gustaría seguir creciendo con nuestra productora Bedmar Films y escribiendo historias que nos muevan y nos conecten con nuestra parte más creativa. Tenemos varios proyectos en mente, pero todavía están en una fase primaria. Intentamos siempre compaginar nuestra carrera como actores con las producciones que levantamos nosotros.

M.B.: Venimos desde hace algunos años queriendo lanzarnos a hacer un largometraje y tenemos algunas ideas en desarrollo. Sospecho que ese va a ser nuestro próximo paso, y ojalá que así sea.